Me han tratado como si estuviera en mi casa. La expresión "Señor Gómez" y todo el cariño y atención demostrada, es algo que estará en mi mente y mi corazón por mucho tiempo.
Buenas habitaciones; muchas horas de gimnasio; buenas comidas y cenas; una sopa de pescado increíble; "algún que otro" tequila; mis clases para preparar un buen Gin Tonic; algunas personas que me preguntan que si mis ojos eran naturales ¡¡¡¡¡; los puros fumados en el patio refugiado de la lluvia permanente , con muchas reflexiones en la cabeza; etc...
Me costará mucho irme cuando me llegue el momento. Dejo algunas fotos de los momentos vividos.
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| En Mi gimnasio |
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| El World Trade Center desde el hotel |
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| Jorge, que además de tratarme como a un rey, hace más grande al hotel. |
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